En CONBICI medimos el material particulado PM2,5 y PM10 con un medidor portátil mientras vamos en bici o caminamos por la ciudad. Aquí os decimos cómo saber la calidad del aire que respiramos nos ayuda a proponer soluciones para disminuir la contaminación y proteger la salud.

¿Por qué al pedalear por nuestras ciudades recomendamos desde ConBici medir la calidad del aire con monitores portátiles?
Tradicionalmente se viene midiendo el nivel de contaminación del aire urbano mediante sensores colocados en estaciones fijas en determinados puntos de la ciudad.
Su mayor inconveniente es que no refleja la calidad del aire en tiempo real que se respira al pedalear por las vías ciclistas, caminar, correr o estar parados en la acera o cruzando la calzada, ya que las referidas estaciones están colocadas en lugares alejados de aquellos por los que habitualmente nos movemos ciclistas y ciudadanía en general, a pocos metros de los tubos de escape de los vehículos motorizados.

Para salir de dudas, qué mejor que empezar a medir con las nuevas tecnologías, la calidad del aire que inhalamos cuando pedaleamos por las vías ciclistas de la ciudad, nunca como alternativa a las estaciones fijas sino como una información complementaria a la aportada por aquellas.
Medidor AirBeam2.

AirBeam2 es un instrumento de calidad del aire del tamaño de la palma de la mano, de bajo costo que mide concentraciones de partículas microscópicas dañinas en el aire, conocidas como material particulado, así como la humedad y la temperatura.
El AirBeam2 mide el material particulado con precisión comprobada y cuando se usa junto con la plataforma AirCasting, ayuda a las organizaciones comunitarias, educadores, académicos, reguladores, administradores de la ciudad y científicos ciudadanos a mapear la contaminación del aire y organizarse para lograr un aire limpio.
El AirBeam2 mide el material particulado aspirando aire y midiendo la concentración y el tamaño de las partículas mediante un método de dispersión de luz.
Compra del monitor AirBeam2.
https://www.habitatmap.org/airbeam/buy-it-now
El precio es de 249 $ la unidad + gastos de envío internacional, el envío fuera de los Estados Unidos es de 25$ + gastos de aduana, a veces no lo retienen en la aduana.
Puesta en marcha del AirBeam2.
En modo móvil (sobre la mochila o cestón de la bici) o colocado fijo (sobre la mesa).
Del AirBeam2 las medidas pasan a:
- Si lo usamos de manera móvil.
- Cada segundo por Bluetooth al teléfono Android (todos menos los iPhones) en el que habremos instalado la app AirCasting desde PlayStore.
- En el momento podemos ir viendo las medidas que estamos realizando de 3 maneras distintas
- Cuando estemos conectados a un wifi el teléfono envía todo lo medido a la página web AirCasting de acceso libre.
- Si dejamos el medidor fijo en un punto.
Debe tener conexión Wifi o un móvil cerca, el medidor AirBeam envía cada minuto las medidas a la página web AirCasting.
Hemos comprado este estupendo detector de partículas, lo tenemos en nuestras manos y ¿ahora cómo ponemos en marcha el AirBeam2?
- Cargar el AirBeam2
- Instalar en el móvil la app AirCasting
- Poner en relación el móvil y el AirBeam2.
- Debe de estar activado el Bluetooth del móvil.
Elegir de entre los aparatos con Bluetooth el que detecta el móvil a AirBeam2 y conectarlos. Ya está. Es fácil pero para una mejor comprensión se detalla en imágenes su PUESTA EN MARCHA en el archivo power point adjunto Gerardo AirBeam.
Correlación de los sensores PM2,5 con las estaciones fijas.

El monitor AirBeam2 de procedencia norteamericana, ha sido testado por la South Coast AQMD de la EPA, (Agencias de Protección Ambiental), responsable de mejorar la calidad del aire en grandes áreas del estado de California, que ha desarrollado el programa AQ-SPEC que evalúa el rendimiento de sensores de bajo coste existentes en el mercado.
Para ello realizan ensayos de campo de estos monitores tomando como referencia las estaciones fijas oficiales de control de la contaminación atmosférica. Y luego con pruebas más detalladas en entornos controlados de laboratorio.
Los resultados de correlación de los sensores AirBeam2 con las estaciones fijas han sido satisfactorios, como se deduce del coeficiente de determinación (R2), parámetro estadístico que mide el grado de relación entre dos variables.
Un R2 próximo a 1 refleja una correlación casi perfecta, mientras que un valor de 0 indica una completa falta de correlación entre las variables. En nuestro caso, el coeficiente R2 era del orden de 0,90. Y al proporcionar al público información sobre el rendimiento de estos sensores, este sabe qué sensores son los mejores existentes en el mercado.
Asimismo, para dar con los sensores de partículas finas PM2.5 más adecuados existentes en el mercado, nos pusimos en contacto con personal del CSIC (Centro Superior de Investigaciones Científicas) que nos indicó que había equipos de bajo coste y tamaño reducido, aptos para llevarlos en la bici en un periodo de tiempo razonable.
Y que técnicos del CSIC acababan de realizar un estudio cuyo objetivo consistió en evaluar el funcionamiento de varios sensores existentes en el mercado, para la medida de la calidad del aire en condiciones reales.
Entre los monitores estudiados y con mejores resultados de correlación con los sensores de las estaciones fijas (de referencia) se encontraba el medidor óptico para partículas AirBeam, que es el sensor por el que finalmente se decantó Kalapie.
Mediciones realizadas por Kalapie con el medidor AirBeam2.
Con la colocación en la bicicleta de los monitores AirBeam2, equipados de sensores de medida de partículas finas PM2.5 (inferiores a 2.5 micras), nuestra Asociación ciclista empezó a medir a inicios de 2017 la calidad del aire en tiempo real que los ciclistas respiran al desplazarse por la ciudad de Donostia-San Sebastián.
Para ello ha llevado a cabo desde entonces alrededor de 4000 mediciones de partículas PM2.5. Las nuevas tecnologías (sensores, internet y apps) ponen hoy día en nuestras manos herramientas para obtener datos de la calidad del aire urbano que inhalamos.
Los sensores se comunican con el smartphone, vía bluetooth, en el que se geolocalizan y visualizan. Mientras uno pedalea puede ir viendo en cada momento en el smartphone el nivel de partículas finas PM2.5, así como el valor pico y promedio del recorrido realizado.

Al terminar las mediciones de un trayecto, los datos se envían a una página web http://aircasting.org/, en la que se almacenan y pueden verse y analizarse, siendo de libre acceso para el público.
Las diferentes medidas realizadas se van superponiendo para darnos una visión de conjunto de la ciudad. Podemos desglosarlas por horas, fines de semana, calles…
Estos sensores PM2.5 permiten también medir la calidad del aire en puntos fijos de áreas urbanas en tiempo real, como un complemento de las redes de medida de calidad del aire existentes en las ciudades (estaciones fijas).
Vemos pues que las nuevas tecnologías puede jugar un papel esencial para medir la calidad del aire en tiempo real y, en consecuencia, mejorar nuestra salud y concienciar sobre la necesidad de una movilidad más sostenible y saludable.
Área de salud y medioambiente de ConBici.
Carlos Pérez Olozaga
Marian Sintes
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