Información relevante sobre Medio Ambiente y Cambio Climático.
El exceso de vehículos a combustión en las ciudades produce, entre otros efectos negativos, congestión viaria, contaminación atmosférica, ruido ambiental y elevadas emisiones de gases de efecto invernadero con notable contribución al cambio climático.
Todo ello incide directamente en la salud y calidad de vida de la ciudadanía, convirtiendo las ciudades en entornos insalubres, peligrosos y desagradables para la vida cotidiana de la población.
Hacer compatible una vida saludable en las ciudades con la lucha contra el cambio climático es uno de los mayores desafíos que vamos a tener que enfrentarnos en el futuro y en el que la ciudadanía y los gobiernos tienen un papel fundamental para conseguirlo.

El reto número 11 de los Objetivos de Desarrollo Sostenible de las Naciones Unidas, dirigido a conseguir ciudades y comunidades sostenibles, necesita tanto acciones institucionales como la implicación de la ciudadanía.
Existe una clara relación entre destrucción de hábitats, insalubridad del entorno, hipermovilidad mundial, cambio climático y enfermedades emergentes de rápida propagación.
Lo que realmente nos hace daño no son solo los eventos cotidianos sino los más improbables con efectos catastróficos, como es ahora el caso de la pandemia sanitaria por COVID-19. Así que tendremos que estar preparados ante situaciones en las que todo puede empeorar.
Según la Unión Europea (UE) alrededor del 70% de la población europea vive en zonas urbanas, y la ONU pronostica que esta cifra aumentará hasta el 80% para 2050.
En la UE la movilidad urbana representa el 40% de todas las emisiones de CO2 del transporte por carretera y hasta el 70% de otros contaminantes del transporte.
Hasta el 96% de los ciudadanos de la UE que viven en zonas urbanas están expuestos a niveles de contaminantes en aire que la Organización Mundial de la Salud (OMS) considera perjudiciales para la salud.
La movilidad urbana sostenible es uno de los principales desafíos a los que se enfrentan las ciudades de la UE y preocupa a muchos ciudadanos.
El logro de los objetivos de Desarrollo Sostenible planteados necesitará de la aplicación de multitud de acciones a todos los niveles de gobierno: europeo, nacional, regional y local.
Según la Asociación de los Ciclistas Europeos (ECF) ir en bicicleta, caminar y los vehículos compartidos son parte de una solución rentable para transformar las ciudades en espacios urbanos más habitables.
Para aumentar el uso cotidiano de la bicicleta, habría que tomar, entre otras, las siguientes medidas: menos coches, menos camiones, dedicar más fondos públicos para infraestructura de ciclismo, límites de velocidad más bajos, uso compartido de bicicletas públicas, planificación efectiva de la intermodalidad, campañas de promoción para el ciclismo y la marcha…
Para la ECF la UE debe proporcionar más fondos para la infraestructura de ciclismo de lo que lo hace actualmente. La demanda de ECF es invertir el 10% de todos los fondos de infraestructura de transporte en ciclismo.
Los planificadores urbanos de Copenhague diseñan la ciudad a escala humana con la infraestructura de bicicletas como parte integral del tejido urbano, al mismo nivel de prioridad que tiene el sistema de metro número uno de la ciudad.
Como ejemplo notable a destacar, el desarrollo del plan urbano CON CERO AUTOMÓVILES que se está llevando a cabo para 12,000 residentes en Utrecht.
El nuevo distrito de la ciudad holandesa dará prioridad a peatones y ciclistas,
transformando radicalmente un polígono industrial cercano al canal junto con diez propietarios.
Podría estar en funcionamiento como un denso suburbio ecológico sin automóviles para 2024.
En Londres los automóviles privados son un medio relativamente ineficiente para mover personas. Ocupan el 19 por ciento del espacio de la calle del centro de la ciudad cuando representan solo el 11 por ciento de los kilómetros recorridos. En comparación, los autobuses ocupan solo el 11% del espacio de la calle, pero representan el 57% de los kilómetros recorridos.
Necesitamos usar el espacio que los autos ocupan de manera más eficiente.
La dependencia del automóvil conlleva peligro en la carretera y contaminación del aire, limitando las oportunidades para caminar y andar en bicicleta.

LA PROPIEDAD DEL AUTOMÓVIL es el factor más importante que influye en la frecuencia con la que caminan y andan en bici los londinenses.
La mayoría de los viajes en automóvil realizados por londinenses se pueden hacer caminando o en bicicleta.
El programa Vecindarios de bajas emisiones ayudará a los distritos de Londres a mejorar la calidad del aire local y las Zonas de autobuses de bajas emisiones darán prioridad a los autobuses más ecológicos en las rutas más contaminadas.
Grupo de Trabajo Salud y Medioambiente
Carlos Pérez Olozaga
Marian Sintes Marco
Accede al completo Beneficios medioambientales, psicofísicos, económicos de la bicicleta
MUY INTERESANTE información, que no es habitual encontrarse en otro medio. Este tipo de trabajos como el vuestro además de informar, motiva, despierta y refuerza actitudes en cualquier estrato social. Gracias por vuestro trabajo
Gracias Ignacio. Valoro muy especialmente tu comentario por haber podido compartir con un profesional como tú tantos años de nuestra dilatada vida laboral.
A ver si ahora desde ConBici conseguimos que una consultora especializada en la materia, prepare un documento “a medida de la problemática de nuestras ciudades” y que las instituciones competentes pongan en marcha las acciones correspondientes para conseguir una movilidad más sostenible y saludable, y sin demora alguna, pues la pandemia sanitaria actual, con mayor o menor acierto, la superaremos pero no la climática que nos azota desde hace varias décadas, así como otras sanitarias que desgraciadamente seguirán azotando a la humanidad.