Durante la celebración de COP 25 se presentaron los resultados del BARÓMETRO DE LA BICICLETA 2019, un estudio bianual realizado por la Red de Ciudades por la Bicicleta
Se constata que el uso de la bicicleta crece 2 puntos respecto al 2017. Y se debe principalmente por el incremento del uso de la bicicleta por mujeres. En el año 2010, solo un 28,8% de las mujeres eran usuarias de la bicicleta frente al 51,4% de los hombres, en 2019 los datos revelan que el 42,8% de las mujeres son usuarias de la bicicleta, frente al 58,9% de los hombres.
El estudio visibiliza tres brechas de género en:
- Saber montar en bici. El 85% de las personas que no sabe montar en este medio de transporte -un 10% a nivel nacional, según el propio barómetro- son mujeres. No saber montar se acentúa a partir de los 55 años y en población sobreenvejecida mayor de 70 años, ya que en épocas pasadas las mujeres estaban muy limitadas social y culturalmente para realizar toda actividad que no tuviera que ver con el cuidado de la casa y la familia. De ahí que, desde ConBici, reivindicamos un método estandarizado de cursos de formación ciclista urbana, como una bici más, donde las clases que actualmente se imparten son mayoritariamente aprovechadas por mujeres de este rango de edad. También participamos activamente en proyectos como en bici sin edad .
- Habilidad a la hora de circular. Según el barómetro «las mujeres se declaran menos capaces» cuando les preguntan si saben circular, al mismo tiempo que se observa un mayor grado de inseguridad. Nuestros grupos locales promueven calles pacificadas donde los coches circulen a baja velocidad y sean por lo tanto más agradables de recorrer en bicicleta. Además, rutas segregadas para ciclos en las calles principales. También se promueven rutas en grupo, espacios y actividades como rutas seguras que ayudan a la formación teórica y práctica para circular en entornos urbanos.
- Activismo de mujeres en colectivos ciclistas. Esperamos que la tendencia al alza en el uso de la bici continúe y eso induzca además a la incorporación de mujeres no solo en la práctica deportiva, cicloturista, o profesionalización en el sector, si no también a su participación activa en colectivos y organizaciones. Esto implica también un cambio organizativo y de concepto de la militancia, hemos de llevar la sostenibilidad de la vida también al interior de las organizaciones, impulsando el trabajo en equipo y compartido, la reflexión colectiva, y facilitando reuniones y asambleas con horarios razonables y espacios de cuidados.
En el reconocimiento del derecho al espacio público y a la movilidad de todas las personas independientemente de su edad o condición, también trabajamos activamente en mejorar los entornos escolares
Con el impulso a todos estos proyectos esperamos seguir trabajando a lo largo de este año que iniciamos y que eso ayude a mejorar los resultados del próximo barómetro de la bicicleta.